El proyecto se desarrolla en la zona sur de la Isla de Idjwi, situada en el lago Kivu. La Isla Idjwi pertenece a la R.D. Del Congo. Se trata de la isla más grande del país y del interior de África. La isla Idjwi hace frontera, por el este, con Ruanda. Sus dimensiones son de 90 kms de longitud de norte a sur y de 40 kms de este a oeste, siendo su superficie de 310 Km2. Tiene una densidad de habitantes de 526 habitantes por Km2. La población total de la isla en el año 2002 era de 166.429 habitantes.
La situación política es inestable y preocupante, aunque recientemente se ha establecido la paz. Las comunicaciones con el continente se realizan por embarcaciones a motor y una barcaza realiza el transporte de mercancías en una travesía de 5 horas. Las comunicaciones en el interior de la isla, que no dispone de carreteras, son dificilísimas y, por tanto, muy costosas. La población se reúne por familias formando pequeñas localidades y estas localidades forman lo que se denomina “comunidades”. Viven en casas hechas de fango y caña con techos de paja.
La Isla de Idjwi no tiene electricidad ni acceso al agua potable ni, por supuesto, a un saneamiento adecuado. Hay algunas canalizaciones de agua en la Isla de Idjwi que proporcionan agua potable al 4% de la población. En toda la R. D. Del Congo sólo el 34% de la población tiene acceso a los servicios de agua potable.
El 40% de la población de la Isla de Idwji bebe agua del lago y el resto, de arroyos frecuentemente contaminados. En la Isla el cólera (por el mal estado de las aguas del lago), el bocio/tiroides y las enfermedades hídricas, sobre todo la disantería y la amebiasis, son enfermedades prácticamente endémicas y causan estragos en la población.
La actividad productiva de la zona es la agricultura, la pesca en el lago y el comercio con Bukawu de mandioca, bananas y cebollas. Además, el lago contiene gas metano que es explotado por una empresa de EEUU y no repercute ningún tipo de beneficio a la zona.
La población beneficiada, unas 22.000 personas, abarca a toda la población residente en general, y sobre todo a la población rural de la isla, que es la más afectada por la carencia de instalaciones de traída de agua potable y la que sufre en primera persona las consecuencias de las enfermedades hídricas, como son el cólera, amebiasis y el bocio/tiroides.
Se trata de la construcción de una instalación de captación de aguas de manantiales naturales y la distribución de la misma a varios poblados, centros de salud y escuelas, construyendo las fuentes que permitan a la población coger el agua sin tener que transportarla desde el lago o de arroyos normalmente contaminados.
El proyecto afectará a una población de 22.000 personas y eliminará el trabajo del transporte del agua a unas 2.300 mujeres y a unos 5.400 niños. La base del proyecto es la participación activa de la población, los hombres en la construcción y las mujeres en la administración de los consumos de agua.
El Socio local es la Compañía de María; el Proyecto fue presentado a la Convocatoria de 2003 del Gobierno Vasco: para un presupuesto de 96.972,47 euros, la subvención aprobada por el Gobierno Vasco fue de 72.268,92 euros.